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SIMSEK Nuray

Libertad de expresión, derechos civiles y políticos

Descripción

Miembro del Sindicato de Profesionales de la Educación, rama de la Confederación Nacional de Sindicatos de Funcionarios, fue despedida en 2017 por sus opiniones políticas. Como parte de la política del gobierno turco de reprimir las voces de la oposición, también se le privó del derecho a viajar, trabajar y presentarse a las elecciones. En protesta, ella y sus compañeros organizaron varias acciones públicas. Detenida y procesada, no cesó en su activismo. Miembro de la Asociación de Derechos Humanos desde 2016, también trabaja en la Comisión contra el Racismo y la Discriminación.

"La iniciativa Marianne fue una oportunidad única e importante para mí, porque en Turquía no siempre tenemos la oportunidad de criticar o expresar nuestras opiniones".

 

 

"En Turquía, pensar diferente se ha convertido en motivo suficiente de encarcelamiento.

 

Entrevista con Nuray Şimşek - 20 de marzo de 2024

¿Podría presentarse?

Soy Nuray Şimşek, profesora de filosofía de Turquía. Soy defensora de los derechos humanos y vivo en Francia desde el inicio de mi participación en la Iniciativa Marianne.

¿Puede describir su compromiso como Defensor de los Derechos Humanos?

Llevo luchando por los derechos de los estudiantes desde que estudiaba en la universidad y he seguido haciéndolo en el mundo profesional por los derechos de los trabajadores como enfermera y luego como profesora. En 2017 me despidieron por mis opiniones políticas y mi participación en el Sindicato de Profesionales de la Educación. El despido se justificó alegando que era una persona peligrosa para el Estado, así que me di cuenta de que era porque trabajaba por los derechos humanos y denunciaba abusos. Después de eso, me concentré en mi trabajo con la rama de Estambul de la Asociación de Derechos Humanos, de la que soy miembro y activista. He seguido luchando por los refugiados, los trabajadores, las personas LGBTQ+ y los presos. Dentro de esta asociación, también he trabajado en el comité contra el racismo y la discriminación. Así que soy víctima, testigo y alguien que lucha por los derechos humanos.

¿Por qué decidió dedicarse a los derechos humanos?

En Turquía existe opresión en todos los aspectos: detenciones y encarcelamientos arbitrarios, malos tratos y torturas en prisión, racismo, discriminación, presiones a periodistas y disidentes políticos, y falta de libertad de pensamiento y expresión. Me resultó imposible no implicarme en cuestiones de derechos humanos. Participé activamente en manifestaciones, actividades y eventos, pero eso no era suficiente y quería hacer oír mi voz ante la comunidad internacional. Las secuelas del intento de golpe de Estado de 2016 contribuyeron a motivar mi compromiso, ya que miles de personas fueron destituidas repentinamente, declaradas terroristas y detenidas arbitrariamente. Además, muchos activistas de derechos humanos, periodistas y opositores políticos están actualmente en prisión.

¿Cómo le ayudó la Iniciativa Marianne a hacer realidad su proyecto?

El programa de la Iniciativa Marianne me ha ayudado mucho, sobre todo para que se me escuche internacionalmente. Por primera vez en mi vida, pude decir lo que pasaba en mi país y, por primera vez, tuve la impresión de que alguien podía oírme. Fue como si el compromiso de toda mi vida cobrara sentido. Ya no era como gritar al mundo desde Turquía.

¿Qué actividades le han resultado más útiles durante el programa?

Como parte de la Iniciativa Marianne, pude reunirme y hablar con diplomáticos, periodistas, políticos y los demás galardonados. Los cursos de formación fueron enriquecedores, sobre todo los de negociación, liderazgo y ciberseguridad. Pude aprender a poner en marcha una campaña de recaudación de fondos. Para mí, la visita más memorable fue al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, un símbolo de justicia imparcial a mis ojos. En Turquía existe un sistema judicial en teoría, pero no es digno de confianza en la práctica.

¿Qué hizo al final del programa?

Me quedé en Francia porque me casé con un francés.

Actualmente estoy desarrollando un proyecto activista con dos colegas de la Iniciativa, Noura y Tatsiana. Antes del programa, trabajábamos en ámbitos similares. Cuando trabajaba para la asociación de derechos humanos de Estambul, informaba sobre las violaciones de los derechos humanos en las cárceles turcas, basándome en las cartas que los presos enviaban desde la cárcel. Además, muchos de mis familiares han sido encarcelados y yo misma he estado detenida en varias ocasiones. Tatsiana lucha por su hermana, y Noura perdió a su marido en prisión. Nuestras historias son similares.

Esto es lo que nos llevó a fundar nuestra asociación en Francia, destinada a defender los derechos de los presos políticos, porque juntos somos más fuertes. Se llama "Voix des prisonniers", y nació del programa de la Iniciativa Marianne. Ya hemos registrado nuestra asociación y estamos ultimando los últimos trámites administrativos. Espero que consigamos ayudar a los presos.

¿Desea añadir algo?

Sí, si algo he aprendido es que no tiene sentido hablar si nadie te oye. En Francia me escucharon, así que mi compromiso tenía sentido. Quiero dar las gracias a todos los que han hecho posible la Iniciativa Marianne. Era vital que existiera este programa. Cada año, nuevos galardonados, defensores de los derechos humanos, se unen al programa, hablan de sus carreras y comparten sus experiencias de vida en sus países. La solidaridad es la consigna de esta Iniciativa.

¿Tiene alguna pregunta? Estaremos encantados de escucharle.

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